lunes, 28 de noviembre de 2011

El PP y la representación de la realidad


¿A alguien le ha sorprendido la espantada de Rajoy desde que ganó de forma incontestable las elecciones generales? El PP a día de hoy tiene un grave problema de discurso político y si se me permite la pedantería, casi de representación de la realidad. Eso explica su necesidad de mantener un perfil bajo y metabolizar un nuevo mensaje con el que salir a la palestra porque ya ha pasado el 20N y no hay visos de que nada vaya a cambiar.

(Soy consciente que reclamar al nuevo Gobierno que empiece su gestión a dar resultados es totalmente irracional, pero también fue totalmente irracional su oposición y ellos mismos han abonado el campo de minas por el que alegremente ahora deben discurrir. No va a haber tregua. Es lo que tiene hablar de sandeces como Pregobierno)

Durante meses han querido mostrar que toda la crisis era fruto de la ineficacia y necedad de un único individuo arropado por un partido inútil. Esta mezquina representación de la realidad española que ha funcionado de manera espectacular a la hora de erosionar la base electoral del PSOE y reforzar la suya propia ahora se demuestra insuficiente a la hora de explicar, diagnosticar y ofrecer un tratamiento creíble de la crisis. Resulta que el sentarse en el sillón y transmitir confianza no va a ser suficiente para remontar una Crisis jamás vista en nuestro país. La inercia de 2011 no es la inercia de 1996.

Les queda el as en la manga de los déficits secretos y la peor herencia del Mundo Mundial pero eso significaría Cospedalizar la deuda pública española en un tiempo record por lo que el sentido común dicta que deberán dosificar esos mensajes de una manera sutil y no explicita. Más nos vale.

Y eso mismo lo que debe estar rumiando Rajoy ahora con sus oráculos y "spin doctors" como todo el Gobierno, Partido y medios afines pueden salir en tromba con un nuevo mensaje que repetirnos hasta la saciedad, un nuevo "España va a ir bien en cuanto soltemos lastre de la herencia sociata") Y quizás les funcione pero sólo si se evita el default y esa cifra de parados comienza a descender. Si no es el caso, no habrá retórica que pueda salvar al PP de sus incumplidas promesas de enderezar mágicamente la situación.

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