domingo, 12 de diciembre de 2010

Y nosotros con estos pelos


Recuerdo unas declaraciones de un Ministro alemán hace algunos años cuando este país presentaba sus aburridas y átonas tasas de bajo crecimiento económico en el que se reía un poco de la idea de la "sociedad de servicios" con la afilada frase que no se podía esperar que una economía se impulsara con la gente "cortándose el pelo los unos a los otros". En aquel momento parecía una frase jocosa pero si sustituimos "cortarse el pelo" por "venderse pisos" pues ya no da tanta risa.

Lo que el alemán quería decir es que a la postre lo importante es tener una economía exportadora, que se especialice en productos de valor añadido y que sea capaz de generar una balanza comercial/financiera equilibrada. En 2010 Alemania va a crecer a un 4 % mientras países como España se encuentran estancados y haciendo piruetas al borde del abismo.

¿ Por qué esta perorata ? Pues porque tras darme un paseo tróspido hoy por el desolado comercialmente centro de Alicante, me da la impresión de que los únicos establecimientos que resisten y siguen abriendo son las peluquerías. (Junto a los omnipresentes bazares chinos, para mí la antítesis del comercio) Este boom de las peluquerias debe explicarse en que los gastos de embellecimiento personal con un importe razonable, no se han visto afectados y la inversión de abrir una peluquería no debe de ser muy grande. En fin que tras el batacazo de la burbuja inmobiliaria, da la impresión que nos lanzamos a hacer exactamente lo que el alemán desaconsejaba a hacer.

En fin, no me malinterpreten que no tengo absolutamente nada en contra de las peluquerías y que el comercio de las ciudades, cualquiera que sea, ni determina ni deja de determinar modelo económico ninguno, pero no deja de ser sintomático.

2 comentarios:

Pedro Mas dijo...

Pues conmigo que no cuenten. Ni para cortarme el pelo ni para venderme otro piso.

Alex dijo...

Lo que hay que hacer es comprar ropa en Outlets!!!