Hasta sus más fieles admiradores deben reconocer que Rajoy no tiene pillado el truco a sus apariciones mediáticas. Puede que sea un buén orador , cuando él mismo se escribe el guión, pero a la hora de teatralizar sus intervenciones acaba por protagonizar esperpentos cómo aquel discurso que se marcó el Día de la Hispanidad , su misteriosa rueda de prensa el 13 de Marzo de 2004 instando a la gente que se fuera a su casa en virtud de una extraña legalidad o sin ir más lejos sus extrañas soliloquios de niñas. ( O por no hablar de sus deslices sobre el coñazo del desfile de las FF.AA o lo que su primo opinaba del cambo climático)
Hoy con la inestimable complicidad de el periódico El Mundo , Rajoy ha decidido regalarnos una portada insuperable. El lider de la oposición ha tenido los santos huevos (sic) de plantarse en frente de una oficina del paro a primera hora y hacerse una foto con la cola de la gente esperando para entrar. ¿ Será el inicio de una serie semanal de el diario donde Rajoy se irá colocando al frente de los problemas que acucian a España y rematando con titulares prodigiosos: "Cuando yo gobierne, ETA se rendirá" (Foto en frente de una HerrikoTaberna), "Cuando yo gobierne, a España se le respetará en el extranjero " (Foto en el desierto Mauritano o en la costa somalí).
El simbolismo de la foto es evidente. Rajoy quiere lanzar un mensaje contundente de salvapatrias y claro una imágen, aunque sea de pura explotación, vale más que mil palabras y, por supuesto, mil medidas. Pero no nos déjemos engañar, como decía Anguita centrémonos en el "programa, programa, programa"¿ Cómo se propone hacerlo ? Pues habla fundamentalmente de 3 objetivos: “En primer lugar, el control del gasto público; segundo, resolver el problema del crédito; y tercero, llevar a cabo la urgente reforma laboral”
Vayamos por partes:
1. Control del gasto público: Con la iniciativa privada completamente KO, Rajoy pretende llevar una política de austeridad en el gasto cuando la prioridad no es otra que estimular la demanda. Cuando los santuarios neoliberales de USA y UK se han visto obligados a tragarse todos sus principios y replantearse de forma absoluta su política macroeconómica, Rajoy nos ofrece medidas destinadas a dar una imagen de eficacia a algo que sería absolutamente ineficaz.
2. Resolver el problema del crédito: ¿ Cómo piensa hacerlo ? ¿ Creando un banco público ? No lo especifica pero mucho nos tememos que desbloquear el crédito no se puede hacer sin un generoso gasto y respaldo público que avale la oferta de crédito lo cual entra en conflicto con su primera prioridad.
3. La urgente reforma laboral: Ya se ha comentado alguna vez que la economía española no tiene un problema de origen laboral sino que es el mercado laboral sufre las terribles consecuencias de un modelo desequilibrado, especializado en sectores de baja productividad. De una alternativa a ese modelo, no parece tener mucho que decir.
Rajoy en definitiva ofrece medidas muy poco ambiciosas y de muy bajo calado estructural. Son medidas cosméticas y superficiales que buscan dar una imagen de rancia austeridad y eficacia pero que no dejan de adolecer de una enorme miopía a la hora de diagnosticar los males que aquejan a nuestra economía. Su batería de propuestas buscan ser el contrapunto sobrio a la imagen del gobierno de Zapatero (Derrochador, amiguista de funcionarios y sindicatos, etc...) más que intentar superar nuestros graves desequilibrios y reorientar nuestro maltrecho y tan necesitado modelo productivo. Lástima que a Zapatero se le haya ocurrido iniciar ese recorrido en 2009 y no en 2004 con la burbuja a pleno, y tan agradecida estadísticamente, rendimiento.
Hoy con la inestimable complicidad de el periódico El Mundo , Rajoy ha decidido regalarnos una portada insuperable. El lider de la oposición ha tenido los santos huevos (sic) de plantarse en frente de una oficina del paro a primera hora y hacerse una foto con la cola de la gente esperando para entrar. ¿ Será el inicio de una serie semanal de el diario donde Rajoy se irá colocando al frente de los problemas que acucian a España y rematando con titulares prodigiosos: "Cuando yo gobierne, ETA se rendirá" (Foto en frente de una HerrikoTaberna), "Cuando yo gobierne, a España se le respetará en el extranjero " (Foto en el desierto Mauritano o en la costa somalí).
El simbolismo de la foto es evidente. Rajoy quiere lanzar un mensaje contundente de salvapatrias y claro una imágen, aunque sea de pura explotación, vale más que mil palabras y, por supuesto, mil medidas. Pero no nos déjemos engañar, como decía Anguita centrémonos en el "programa, programa, programa"¿ Cómo se propone hacerlo ? Pues habla fundamentalmente de 3 objetivos: “En primer lugar, el control del gasto público; segundo, resolver el problema del crédito; y tercero, llevar a cabo la urgente reforma laboral”
Vayamos por partes:
1. Control del gasto público: Con la iniciativa privada completamente KO, Rajoy pretende llevar una política de austeridad en el gasto cuando la prioridad no es otra que estimular la demanda. Cuando los santuarios neoliberales de USA y UK se han visto obligados a tragarse todos sus principios y replantearse de forma absoluta su política macroeconómica, Rajoy nos ofrece medidas destinadas a dar una imagen de eficacia a algo que sería absolutamente ineficaz.
2. Resolver el problema del crédito: ¿ Cómo piensa hacerlo ? ¿ Creando un banco público ? No lo especifica pero mucho nos tememos que desbloquear el crédito no se puede hacer sin un generoso gasto y respaldo público que avale la oferta de crédito lo cual entra en conflicto con su primera prioridad.
3. La urgente reforma laboral: Ya se ha comentado alguna vez que la economía española no tiene un problema de origen laboral sino que es el mercado laboral sufre las terribles consecuencias de un modelo desequilibrado, especializado en sectores de baja productividad. De una alternativa a ese modelo, no parece tener mucho que decir.
Rajoy en definitiva ofrece medidas muy poco ambiciosas y de muy bajo calado estructural. Son medidas cosméticas y superficiales que buscan dar una imagen de rancia austeridad y eficacia pero que no dejan de adolecer de una enorme miopía a la hora de diagnosticar los males que aquejan a nuestra economía. Su batería de propuestas buscan ser el contrapunto sobrio a la imagen del gobierno de Zapatero (Derrochador, amiguista de funcionarios y sindicatos, etc...) más que intentar superar nuestros graves desequilibrios y reorientar nuestro maltrecho y tan necesitado modelo productivo. Lástima que a Zapatero se le haya ocurrido iniciar ese recorrido en 2009 y no en 2004 con la burbuja a pleno, y tan agradecida estadísticamente, rendimiento.
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